Nuestra plaza tiene dos características especiales que la hacen única en la región, es la que solo contempla árboles nativos y rinden homenaje a la querida figura de la mujer de nuestra tierra, heroína nunca compensada por toda su lucha que dio en sus primeros años de residencia en nuestra tierra, ella es la gran hacedora, generosa y constructora de todo lo que tenemos aquí, por eso esta plaza simboliza con cariño tal recuerdo. Y para nuestros jóvenes que sientan el perfume de esta naturaleza no contaminada, y el amor brote con más fuerza y pasión en sus corazones.
Un mirada distinta a un arte icono que nos acerca a la modernidad y al compromiso de seguir creciendo a favor de la comuna. Y no solo siendo un reflejo, si no que un recuerdo de nuestros antepasados de surgir, de comprometerse para obtener un mejor futuro para nuestros hijos.
“La Tierra no es una herencia de nuestros padres, sino un préstamo de nuestros hijos”
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